Con éxito se realizó retiro para las Comunidades Cristianas de Trabajadores

Este 6 y 7 de diciembre se realizó en la Casa de Ejercicios Espíritu Santo, el segundo retiro del año enfocadas a las comunidades cristianas de trabajadores que participan en conjunto al Área de Animación Laboral. En esta ocasión, el tema principal fue los Métodos de Oración y estuvo preparado Centro de Espiritualidad Ignaciana.

En esta ocasión participaron las comunidades cristianas que se están preparando sus sacramentos de iniciación cristiana, quienes pertenecen a Organizaciones y empresas como Capredena, Servinco, el Poder Judicial, entre otras. 

Para los trabajadores resultó ser muy significativa esta instancia y destacaron las palabras que les entregó durante la misa de cierre el Padre Andrés Moro, Vicario de la Pastoral Social y de los Trabajadores, quien destaco que hay una semilla para hacer crecer la espiritualidad en sus lugares de trabajo  y que ellos tienen que ser la esperanza para que crezca.

Juan Zúñiga, de la comunidad Almas de Cristo de Servinco, destacó que el retiro fue muy bonito y que lo unió más  con sus compañeros de trabajo y fe, haciéndolos crecer como cristianos, como personas y como amigos. “Me quedo con muchas ganas de hacer crecer la comunidad en el trabajo. Vinimos acá ocho compañeros de trabajo y todos nos vamos con muchas ganas, muy alegres, más unidos, entonces eso lo queremos seguir transmitiendo durante el resto del año en todas las actividades que tenemos.”

Para Carlos Rosas,  miembro de la comunidad del Poder Judicial  y que está en formación para recibir sus sacramentos, destacó que después de la actividad tiene más motivación de seguir en el llamado que el Señor le hace. “Me quedo con un inmenso llamado a llevar la palabra de Dios a un campo tan importante como es la justicia. Acabo de cumplir más de 40 años en el poder judicial y sentí el llamado nuevo, como el que me hizo cuando yo era un muchacho y trabajé en las comunidades de mis barrios, de mis poblaciones. En cambio, ahora el señor me está llamando dentro del campo en el que yo he estado toda una vida a anunciar su palabra.”

Blanca Morales, de Capredena, sintió que tras el retiro quedo llena de libertad, con harto amor y con mucha paz consigo misma. “Ahora continuaré con lo aprendido en este retiro empezando por mi retroalimentación y una vez que yo viva mi paz, mi reconciliación y todo mi amor, lo entregaré a todos nuestros compañeros de trabajo, en especial a quienes nos cuesta más entregar el evangelio”.

El Padre Andrés Moro, Vicario de la Pastoral Social y de los Trabajadores, destacó cómo se ha convertido en tradición que al final de cada año las comunidades de trabajadores del área de animación laboral de la Vicaría tengan un espacio de retiro para poder profundizar en el don de la fe y también en ese don de servicio en el mundo del trabajo. “Por eso, agradecemos a todos los hermanos y hermanas que durante el año fueron un testimonio de fe viva, creyente y solidaria en su lugar de trabajo y les agradecemos con este retiro, en el cual el Centro de Espiritualidad Ignaciana vuelve de nuevo a ayudarnos para vivir la espiritualidad en el trabajo”, concluyó el Padre Andrés Moro.