Cardenal Ezzati Bendice a Trabajadores y Trabajadoras a honorario del sector público

La Bendición a los Trabajadores y Trabajadoras forma parte de las actividades de la Semana del Trabajo 2015, organizada por la Vicaría de Pastoral Social y de los Trabajadores, junto a otras organizaciones. Bajo el lema “Si juntos trabajamos, Juntos Cosechemos. La riqueza es para Todos”,  la Semana del Trabajo este año quiere relevar la importancia de hacer cada vez más participes a todos los chilenos de los bienes que el Dios ha puesto a disposición y que el trabajo de todas y todos han acrecentado.

Cada año en la bendición de trabajadores y trabajadoras se hace presente a un sector laboral específico. Años anteriores el Pastor de Santiago ha bendecido a trabajadores de la Vega de lo Valledor, del sector salud, construcción, trabajadoras de casa particular, recolectores de basura y vendedores ambulantes de la locomoción colectiva el año pasado. En todos ellos la Iglesia de Santiago quiere hacer presente su preocupación por la dignidad del trabajador.

 “La Iglesia de Santiago para celebrar el Día Internacional del Trabajo invita a poner la atención y preocupación en distintos sectores de trabajadores, podríamos decir, usando las palabras del Papa Francisco, que son los marginados o los olvidados por eso este año queremos relevar la importancia y dignidad del trabajo de los funcionarios a honorarios, entendiendo que ellos hacen un trabajo muy similar y a veces hasta más intenso que un trabajador de planta sin recibir la misma remuneración y beneficios”, señala el Vicario de la Pastoral Social y de los Trabajadores, Padre Andrés Moro.

Según estimaciones de la Unión Nacional de Trabajadoras y Trabajadores Públicos a Honorario de Chile, unos 200 mil personas trabajan a honorarios del estado, desde el gobierno central las municipalidades y los programas provistos por el estado central a los municipios.  Sobre las condiciones de trabajo de este sector, el Secretario General de la organización, Juan Domingo Silva plantea que su situación pone en evidencia la precariedad del mundo laboral.

“Demandamos la creación de una nueva y única forma de contratación de los trabajadores y trabajadoras del Estado, el reconocimiento de su calidad contractual, que nos igualen las condiciones que tienen los trabajadores a contrata y de planta ya que cumplimos las mismas funciones. No tenemos previsión y la previsión que existe responde más a los intereses del mercado que a los de los trabajadores”, sostiene el dirigente.

Otra de las demandas de la organización es que exista un sistema de salud al alcance de los trabajadores a honorario,  con acceso a la salud sin que tengan que pagar la previsión social a una afp. En el camino para avanzar en estas demandan solicitan que se abran las mesas de trabajo con las instituciones del estado como los ministerios de Hacienda y Salud.

El dirigente destaca la preocupación de la iglesia sobre la realidad de los trabajadores a honorario. “Nos parece importante que una institución como la iglesia católica también reconozca y se habrá a esta realidad y haga un gesto como la bendición a los trabajadores. Vemos en ello un acto de reconocimiento y de alentarnos a modificar nuestras condiciones. La iglesia reconoce a los trabajadores a honorarios”,expresó el dirigente  Juan Domingo Silva.