Apoyando al emprendimiento migrante desde la economía solidaria

La iniciativa se implementó entre los meses de agosto y diciembre de 2020 y contó con el financiamiento del Fondo Nacional de Cuaresma de Fraternidad, permitiendo la formación de más de 500 emprendedores y emprendedoras en habilidades para emprender, herramientas digitales, posicionamiento de marca y economía solidaria, posibilitando la iniciación o mejora de planes de negocio de personas migrantes.

“El proyecto también asesoró a los y las participantes en la creación de cooperativas de trabajo y redes de emprendimiento entre personas migrantes, aspirando al fortalecimiento de la asociatividad y participación como una forma de diversificar las estrategias de salida y superación de la crisis actual”, comentó Angelo Mendoza, jefe del área Animación Laboral de la Vicaría de Pastoral Social Caritas .

Apoyada por este  proyecto, Astrid Urbaneja, pudo fortalecer más su emprendimiento de diseño de accesorios para el cabello de bebés y niñas, “esta idea surgió de la necesidad y porque el mercado de los bebés es interminable, ya llevo meses haciendo estos diseños”. 

El proyecto le permitió adquirir nuevos conocimientos, dice Astrid, “había un profesional en cada área: de lo que es una planificación de una propuesta de valor, un presupuesto, me ayudó mucho aprender de las cooperativas, de cómo constituir una empresa de microemprendimiento, los fondos que existen en las municipalidades para este tipo de cosas”. Con este aprendizaje esta emprendedora  ya está evaluando otro mercado al cual dedicarse como es el diseño de accesorios caninos.