Una invitación a dejar que el Señor ilumine nuestra experiencia y que alejemos todo lo que hace prisionera nuestra vida, formuló el Arzobispo de Santiago, Cardenal Ricardo Ezzati, esta mañana al inicio de cuaresma.
Acompañado por los Obispos Auxiliares de Santiago, monseñor Cristián Contreras, monseñor Pedro Ossandón y monseñor Galo Fernández, además de vicarios zonales y ambientales, presidió la misa de miércoles de Ceniza, en la Catedral Metropolitana.
En su homilía, el Cardenal Ezzati, señaló que “este tiempo nos invita a una conversión que significa vaciarse de todo aquello que no es gracia, que no es presencia de Dios en la vida personal y comunitaria. Esto supone volver a las raíces, a entender que somos creaturas creadas a imagen y semejanza de Dios, llamadas a vivir en la comunión con el Señor y entre nosotros”. Y recalcó que este proceso no tiene solo cosas negativas y que no significa despojarse de todo, si no que para llenarse de la novedad del evangelio y reconocer el amor de Dios entre nosotros.
Refiriéndose al mensaje del Papa Francisco, instó a los presentes a preguntarse desde cuando no experimentaban el sacramento de la reconciliación y los motivó a acercarse a Dios y dejarse perdonar. A su vez el Arzobispo recalcó que la conversión no es solo personal, sino que tiene una expresión comunitaria y que se vuelca a los demás, en especial con los que más lo necesitan. “Debemos ser imitadores de Jesús, acercarnos a los más necesitados, a los que requieren la comprensión” y añadió que “no hay auténtica conversión a Dios si no se considera a los hermanos, en descubrir en cada hombre y mujer la imagen de Dios”.
Como signo penitencial, los fieles recibieron la imposición de la ceniza, que se elabora a partir de la quema de los ramos de la celebración del año anterior. Gesto que será repetido en todas las misas en las distintas comunidades.
Cuaresma de Fraternidad
“Aportando juntos, cambiamos vidas” es el lema que inspira la campaña este año, llamando a todos a aportar con un granito de arena para lograr financiar y crear programas orientados a un desarrollo integral infantil al alcance de todos.
Para animar esta iniciativa, Caritas Santiago, área de la Vicaría de la Pastoral Social y de los Trabajadores, está convocando y motivando a parroquias y establecimientos educativos de la arquidiócesis, para que promuevan la participación activa de toda la comunidad, para fortalecer una mirada solidaria hacia las personas más necesitadas, en especial de las generaciones más jóvenes.
Caritas Santiago ya está distribuyendo a parroquias y colegios católicos afiches, material audiovisual y las alcancías donde las personas pueden entregar su ayuda en dinero. El llamado a las comunidades es a depositar lo recaudado entre miércoles de ceniza y Domingo de Resurrección, en la cuenta corriente 880-0 Banco Santander a nombre de Caritas Santiago.
El fondo de Cuaresma ha apoyado en los últimos tres años a 128 proyectos en todo el país, llegando a más de 8000 jóvenes. Las diversas iniciativas han impactado positivamente en ellos.
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