Editorial: Trabajo y Cultura del Cuidado

En este Mes del Trabajo saludamos a tantas trabajadoras y trabajadores que día a día ponen su esfuerzo en su trabajo, colaborando con otras y otros. Justamente, a partir de la centralidad de las relaciones colaborativas, del esfuerzo que despliegan en sus quehaceres y del llamado del Papa Francisco, este año desde la Vicaría de Pastoral Social Caritas queremos proponer un abordaje al trabajo desde la solidaridad, definiendo como tema del mes al Trabajo y los Cuidados.

Desde hace un tiempo se ha tomado mayor conciencia en la relación entre trabajo y cuidados. Más aún con la pandemia, allí las labores domésticas, de educación y primera infancia, de cuidado de personas mayores, remuneradas y no remuneradas, fueron dimensionadas con mucha más centralidad que lo que habitualmente se hacía. Y es que han sido las personas que desempeñan estas labores las que permitían que otras personas pudiéramos incorporarnos adecuadamente a otros espacios de trabajo.

Cuando esas tareas no estaban, muchas personas, sobre todo mujeres, tuvieron que abandonar sus empleos. Y hoy en día, tres años después de iniciada la pandemia, una parte muy importante de esas mujeres no han vuelto al mercado laboral.

Asimismo, desde la Vicaría de Pastoral Social Caritas y otras entidades sabemos que, además de ellas, una proporción importante de mujeres migrantes que han llegado en los últimos años no se están incorporando adecuadamente al mundo del trabajo ya que carecen de redes y dispositivos para el cuidado de sus hijos o para sus familiares con necesidades especiales. Y también hemos visto a niños expuestos al trabajo infantil por el mismo motivo.

Desde la Vicaría de Pastoral Social Caritas, queremos hacer un llamado a promover una cultura del cuidado, poniendo en el centro a la persona, sea esta la que ejerce las tareas de cuidado o aquella que las recibe. Entendiendo esta cultura del cuidado, tal como lo propuso el Papa Francisco en la 54 Jornada Mundial de la Paz, al menos desde tres aspectos: 1) El cuidado como espacio de promoción de la dignidad y de los derechos de la persona. 2) Trabajar por el bien común, donde podamos velar por el resguardo de los derechos, en especial hoy de quienes se dedican a las labores de cuidado, y a su vez de quienes lo reciben; y 3) El cuidado mediante la solidaridad: poniendo atención en los grupos que experimentan más crudamente las barreras para una inclusión más plena.

Para apuntar a una cultura del cuidado en clave solidaria se necesitan múltiples iniciativas, públicas, privadas y de la sociedad civil. Una de estas acciones será la pronta inauguración de un Proyecto de la Vicaría llamado Acompaña Hoy, el cual consiste en un espacio de cuidado seguro para que madres migrantes puedan dejar a sus hijos e hijas y así ellas puedan acceder a capacitaciones y una fuente laboral. Será un pequeño espacio, pero que esperemos pueda generar aprendizajes y nuevas experiencias que permitan multiplicarlo en otros nuevos proyectos. Paso a paso, mano a mano.

Danitza Urrea
Miguel Torres
Dirección de Incidencia y Estudios
Vicaría de Pastoral Social Caritas