Programa Fortalecimiento comunitario finaliza su trabajo junto a comunidades de Quilicura y Cerro Navia
El proyecto, financiado por la Subsecretaría de Prevención de delito, del ministerio del Interior, fue ejecutado desde 2016 a la fecha por la Vicaría de Pastoral Social Caritas.A través de talleres de prevención en colegios, mediación comunitaria para líderes sociales de los territorios y mesas barriales para generar planes de trabajo con los líderes locales, se desarrolló el programa Fortalecimiento Comunitario, llevado a cabo por el área Animación Solidaria de la Vicaría de Pastoral Social Caritas.
El programa comenzó como proyecto piloto en 2016 en las comunas de Quilicura y Cerro Navia, apuntando a la prevención del delito y la violencia en los territorios, con un enfoque comunitario, trabajando con los actores locales, líderes de las organizaciones sociales y en red junto escuelas, un centro de salud familiar y una capilla.
“En el caso de Quilicura el trabajo se focalizó en la población Pucará, que se encuentra geográficamente lejana de los servicios básicos de la comuna pero contaban con un consultorio y una escuela básica, allí hicimos un trabajo en red con estas instancias y con la capilla San Francisco de Asís. Aquí la población objetiva eran adultos mayores y hermanos migrantes”, comenta Gabriela Hume, encargada del programa.
En Cerro Navia, en tanto, explica Gabriela, se realizó un trabajo desde lo intergeneracional porque la población era mixta, con niños, jóvenes y adultos mayores.
El trabajo en ambos territorios se basó en distintas íneas de trabajo; la de prevención con talleres para colegios con la metodología del circo social y de mediación comunitaria desde el buen trato para líderes locales y mesas barriales a través de las cuales se crearon planes de trabajo de acuerdo a las necesidades e intereses de las comunidades, ejemplo de ellos fue el proyecto de una junta de vecinos en Quilicura.
Para la encargada del programa, los frutos durante este tiempo son haber activado a la comunidad y vinculado a las organizaciones sociales que estaban funcionando en los territorios, “eso permite cohesión social y disminuir los factores de riesgo en la inseguridad social”, concluye Gabriela.
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